Ubicado en un solar complejo y estrechamente relacionado con un edificio preexistente, el proyecto de ampliación se organiza en dos volúmenes longitudinales que convergen en su base: un espacio común central con una escalera abierta como protagonista. Desde este eje neurálgico, parten dos amplios pasillos que conectan de forma fluida el área común con las aulas y espacios de trabajo para el alumnado.
Impulsado por el Departamento de Educación del Gobierno Vasco, el proyecto se posiciona como una iniciativa estratégica clave en el ámbito educativo de los últimos años. Apostando por la integración de estándares arquitectónicos bioclimáticos avanzados, la propuesta tiene como objetivo diseñar la mayor infraestructura educativa pública bajo criterios Passivhaus, utilizando una estructura de madera.
Frente al planteamiento de este reto, se abordó el proyecto desde una perspectiva integral, comenzando por la conformación de un equipo multidisciplinar especializado en áreas complementarias a la arquitectura. Este grupo incluye ingeniería de instalaciones y consultorías expertas en arquitectura sostenible y estándares Passivhaus.
La sostenibilidad no solo reside en la eficiencia del diseño, sino también en el propio concepto espacial. La forma del edificio ha sido cuidadosamente estudiado para favorecer la mayor flexibilidad funcional, junto con una ejecución constructiva sencilla y una eficiencia de recursos. Optar por un edificio compacto permite reducir las circulación y la superficie de fachada.
La estructura está compuesta por paneles de carga de madera contralaminada (CLT), un sistema constructivo innovador que marcará el futuro de la construcción. La colaboración con empresas especializadas en estas tecnologías se inició en fases tempranas del proyecto con una participación activa de los ingenieros en las sesiones de desarrollo técnico. La respuesta a las exigencias de la arquitectura bioclimática se confió a un equipo experto en certificación Passivhaus, cuya participación abarcó desde la planificación estratégica hasta el desglose técnico de las fases constructivas, así como la revisión y mejora de soluciones técnicas tradicionales.
El diseño volumétrico parte de la extrusión del área definida por la línea máxima de edificación establecida en las bases de la licitación. Se introduce una modulación estructural que incorpora protección solar y aperturas estratégicas en fachada, lo que potencia la flexibilidad del edificio y posibilita futuras reorganizaciones funcionales.
La arquitectura educativa del futuro, estructura CLT y estándares Passivhaus